miércoles, 28 de marzo de 2012

CANCIÓN :"TODO POR EL ROCK AND ROLL" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

DESEO REITERAR QUE ESTOS EJEMPLOS NO SON PARA EVALUAR QUE TAL SALE LA INTERPRETACIÓN. LA IDEA ES DEMOSTRAR COMO UN AFICIONADO CUALQUIERA TAMBIÉN LAS PUEDE CANTAR MÁS O MENOS BIEN.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 68: "TODO POR EL ROCK AND ROLL" DE EL TRI.


CANCIÓN: "CONTIGO" DE JOAQUÍN SABINA CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CANCIÓN: "FUEGO DE NOCHE, NIEVE DE DÍA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 67: "FUEGO DE NOCHE, NIEVE DE DÍA" DE RICKY MARTIN.


martes, 27 de marzo de 2012

CANCIÓN: "REALMENTE NO ESTOY TAN SOLO" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 66 :"REALMENTE NO ESTOY TAN SOLO" DE RICARDO ARJONA.


CANCIÓN "ESTA NOCHE CONTIGO" DE JOAQUÍN SABINA CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 65: "ESTA NOCHE CONTIGO" DE JOAQUÍN SABINA.


VALS "TAL VEZ" CANTADO POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 64: "TAL VEZ" VALS PERUANO.


VALS "CAUTIVO DE AMOR" CANTADO POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 63: "CAUTIVO DE AMOR" VALS PERUANO.


domingo, 25 de marzo de 2012

CANCIÓN :" COMO UN EXPLORADOR" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


"CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 60: "COMO UN EXPLORADOR" BOLERAZO DE JOAQUÍN SABINA.

SOLO TENGO EL AUDIO DE ESTA CANCIÓN. DE TODAS MANERAS ESPERO QUE LES SIRVA.

CANCIÓN :"ADORO" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRON.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 59: "ADORO" DE MANZANERO.


CANCIÓN:"SANTA LUCÍA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 58:"SANTA LUCÍA"


CANCIÓN:"ASÍ ESTOY YO SIN TI" DE JOAQUÍN SABINA CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

OTRA MANERA, MUY POÉTICA, DE EXPRESAR LA AUSENCIA DEL SER AMADO. MUY AL ESTILO DE SABINA.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 57:"TE LO PIDO DE RODILLAS" DE LOS IRACUNDOS.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N°56:"SÉ QUE NO VOLVERÁS" DE LOS IRACUNDOS.

CURSO DE KARAOKE . PRÁCTICA N° 55:"TRAMPA" DE LOS IRACUNDOS.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 54:"PUERTO MONTT" DE LOS IRACUNDOS.

VALS PERUANO"MIS CELOS" CANTADO POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

CANCIÓN "A PURO DOLOR" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

CANCIÓN "POR AMOR" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

CANCIÓN "PONGAMOS QUE HABLO DE MADRID" DE JOAQUÍN SABINA CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

CANCIÓN "Y NOS DIERON LAS DIEZ" DE JOAQUÍN SABINA CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

TONDERO PIURANO "ESTA ES MI TIERRA" CANTADO POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

UN POQUITO DIFÍCIL PERO ES CUESTIÓN DE PRACTICAR. LA PRÁCTICA HACE AL EXPERTO.

viernes, 23 de marzo de 2012

CANCIÓN:"ESOS LOCOS BAJITOS" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

ESTA ES MI VERSIÓN LIBRE DE ESTA CANCIÓN. YO NUNCA LA HABÍA ESCUCHADO Y ME PARECIÓ QUE ERA ASÍ Y SE ME HACE DIFÍCIL CANTARLA DE OTRA MANERA. DEBO MENCIONAR QUE IGUAL ME SUCEDIÓ CON LA CANCIÓN "ABRAZAR LA VIDA". 

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 53:"ESOS LOCOS BAJITOS" DE J.M.SERRAT.


ESTA VEZ EL KARAOKE ESTÁ EN VERSIÓN MIDI, PERO BASTANTE BIEN LOGRADO. PARA USTEDES ESTE EXTRAORDINARIO TEMA DE SERRAT (LA VERDAD SERRAT NO TIENE TEMAS ORDINARIOS) DONDE SE EXPONE UNA DE LAS MÁS LINDAS RAZONES PARA VIVIR: NUESTROS HIJOS.

jueves, 22 de marzo de 2012

CANCIÓN :"DÍGALE" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

SI USTEDES ME SIGUEN PRIMERO YO POSTEO UNA CANCIÓN CON VIDEO Y PISTA MUSICAL. EL TONO PREVIAMENTE LO HE MANIPULADO PARA QUE PUEDA SER CANTADA POR UN CANTANTE PROMEDIO(ESA ES LA PRÁCTICA) Y  A CONTINUACIÓN LA CANTO COMO EJEMPLO. ES ASÍ QUE A LA FECHA HAY 54 PRÁCTICAS DE KARAOKE Y OTROS TANTOS EJEMPLOS. ESPERO AYUDARLES SOBRETODO A LOS AFICIONADOS QUE SE INICIAN EN ESTE BELLO ARTE. LOS CANTANTES INTERMEDIOS Y AVANZADOS ESTÁN MÁS BIEN PARA QUE ME ENSEÑEN.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 52:"DÍGALE" DE DAVID BISBAL.


CANCIÓN:"MIENTES TAN BIEN" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CUENTO CORTO: "¡¡SANTO DIOS¡¡" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


Carlitos entró excitado y corriendo a su casa de la calle Alfonso Ugarte en Sullana, una ciudad del norte del Perú. Buscó a su mamá Tarcila que en ese preciso instante se hallaba cocinando un plato de cau cau (vísceras de estómago de res en guiso), el plato preferido de él. Y le dijo, mamita debo decirte un secreto: Don Pedrito es un santo. Su mamá sonriendo le dijo ¿Por qué? Y el niño de apenas 11 años le dijo, mamá, tú conoces a mi amigo Eddy y yo te había contado que su mamá estaba muy grave en el Hospital de Sullana, prácticamente estaba desahuciada. Pues yo estaba desesperado por la angustia de mi amigo por la cercanía de la muerte de su madre. Y un día caminando me pregunté quien es un hombre bueno, quien no hace daño a nadie, quien no molesta a las personas. Pues Don Pedrito, no había otro. Y me arrodillé en mi cuarto a la hora de dormir y le recé con todo fervor y le pedí a Don Pedrito que interceda ante Dios para que se cure la mamá de mi amigo. Y qué crees mamita, la señora Gracielita se ha curado. Yo le dije a mi amigo que yo había orado mucho a un santo especial y que él me había hecho el milagro. La señora Tarcila sonrió con paciencia y le dijo, ven hijo, mira eso que ha ocurrido se llama coincidencia. Yo estoy de acuerdo con que Don Pedrito es un hombre bueno pero de allí a que sea un santo hay una gran diferencia. Además está vivo, ese es el principal inconveniente. No existen santos en vida, salvo el Papa, los obispos, los párrocos. Carlitos nunca quedó convencido con esa explicación. Había un tremendo problema, él rezó y el problema se solucionó. ¿Dónde estaba la coincidencia?
Carlitos se lavó las manos y se sentó a la mesa para saborear el manjar que había preparado su mamita para él.
La señora Tarcila se quedó pensando en el tema. Después pasaron los días y continuó la rutina. En pocas semanas la señora Tarcila tuvo entre manos un problema muy grande, había confiado en una vecina, la señora Mechita, amiga de años y le había dado en préstamo un capital que representaba sus ahorros de muchos años. Ella la había convencido que ese dinero le reportaría pingües ganancias en un plazo máximo de 7 días. Tarcila estaba desesperada, ya habían pasado 15 días de ese pacto y la señora Mechita había viajado a Lima y no regresaba. En una noche de pesadumbre se arrodilló (después se arrepintió no de sus pecados sino del dolor de rodillas al levantarse) y le rezó a Don Pedrito con aquel fervor febril de los acreedores. Pidió que aunque sea le devuelva el capital que no importaban los intereses. Sintió vergüenza por ello, pero se dijo a sí misma, no pierdo nada. E increíblemente, al día siguiente, la señora Mechita se apareció con el dinero y con sus intereses de ganancia y se disculpó por la demora. Tarcila empezó a dudar y a tener fe.
No quiso contarle a su hijo esa otra coincidencia porque consideró que estaba en formación y esto podía ocasionarle desconciertos en su fe católica, pero sí se lo contó a su comadre Juana. Ella la escuchó atentamente los dos testimonios y le dijo, no sé que pensar, una coincidencia pasa pero dos, además, cien por ciento de efectividad. Tarcila no reparó que contarle a su comadre era igual a publicar la noticia en los diarios o propalarla por la radio. La noticia cundió en la ciudad. Algunos se reían pero otros lo tomaron más en serio e incluso se persignaban al pasar frente a la puerta de la casa del nuevo santo.
Don Pedrito continuó con su rutina, lo veían pasar a las 6 y 30 de la mañana rumbo a la iglesia para asistir a la misa cotidiana de las 7 de la mañana. A todos los saludaba con su clásico “buenos días de Dios”. Comulgaba diariamente, al salir compraba su pan en la panadería “tres estrellas” y se recluía en su casa. A mediodía le traían un almuerzo del café Grau. Y después no se sabía de su existencia. La gente especulaba. Seguro que para rezando. No se le conoce pareja, ni vicios. No hace ruidos, se ha aislado del mundo pecador. Si no es un santo, le falta muy poco.
En los siguientes días se acercaron a casa de Tarcila otras personas. Don Julio le dijo, he vuelto a tener noticias de mi hijo después de un año y estoy agradecido a Don Pedrito. Ahora sé que mi hijo está bien de salud. Doña María le dijo, a mi mamá la han operado y le pedí a Don Pedrito que salga bien de la operación, y felizmente ha salido bien. Doña Gilda pidió algo más modesto, que su hija salga invicta en las notas del colegio, es decir que no tenga cursos desaprobados y la jovencita salió con buenas notas. Y los ecologistas como Don Mario pidieron que no haya diluvios como hace 2 años que causaron grandes daños y ahora se estaba presentando una sequía, se le había pasado la mano a Don Pedrito. La ciudad estaba conmocionada y la noticia se estaba regando como música de zancudos.
El padre Firmato en la homilía del domingo aprovechó para aclarar que el asunto de la santidad no es una cosa de juego y que sólo la iglesia puede dar ese título después de un riguroso proceso. La gente escuchaba al padre pero no le hacían caso.
Y llegó un día viernes en que nos reunimos las madres y algunos varones en el local comunal para tratar asuntos de interés social y para orar en comunidad. A la hora de rezar, les diré que yo estuve presente. La gente cada vez daba más testimonios sobre los milagros de Don Pedrito. Y una señora dijo, amigos Don Pedrito es un santo raro, está vivo. Otra dijo, pero ya tiene más de 80 años, ya está por morirse. Otra señora dijo, disculpen, pero yo lo veo paradazo, muy saludable, yo dudo que se muera pronto. A lo mejor hasta nos entierra a todos. La señora Eduviges, tomó la palabra y expresó, necesitamos renovar nuestra fe, la burocracia eclesial y celestial se ha amodorrado, se ha aburguesado. Siempre un nuevo mensajero, un intercesor avispado necesariamente provocará la atención, así que nuestro santoral está esperando a un nombre y a un hombre especial. La decisión es nuestra.
Y de pronto, una voz tímida propuso la solución indubitable con una pregunta, ¿y si le pedimos a Dios para que se muera Don Pedrito? Se hizo un silencio en el local, estábamos presentes casi 100 personas.
Y el espíritu, se difundió con un hálito de complicidad, de cinismo y de ausencia total de escrúpulos, y habitó entre nosotros. Y se empezó a escuchar un murmullo que devino luego en un coro enérgico de preces que hasta hoy retumba en nuestras conciencias: “Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado…”

CANCIÓN "EL PROBLEMA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 51: "EL PROBLEMA " DE RICARDO ARJONA.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 50:"MIENTES TAN BIEN" DE SIN BANDERA.


CANCIÓN "AMOR PIRATA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


miércoles, 21 de marzo de 2012

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 49:"AMOR PIRATA" BALADA


CUENTO CORTO: "¿COMO PILATOS?" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

Estaban allí convocados alrededor del penúltimo lecho, cada uno con su ansiedad proporcional al grado de hijo que sentían y tenían especial curiosidad por escuchar las últimas palabras de su querido padre.
Decir que estaban unidos era una exageración. Pero irónicamente estaban re-unidos y se notaba en sus respiraciones las inmensas diferencias que siempre los habían caracterizado y que con el correr de los almanaques se hicieron más evidentes.
Eran 8, y ahora sabían que eran 4 medio hermanos de los otros y éstos decían, a su vez, lo mismo. Solamente eran hermanos perfectamente simétricos : 4 y 4. Su padre habíase casado con una primera esposa y luego de enviudar decidió reincidir con una fortuna igual en todo : una esposa y 4 hijos. Estaban allí y no estaban. Los minutos pasaban y veían a papá que hacía esfuerzos cada vez mayores para capturar el aire que ellos sabían le estaban robando y de repente lo veían abrir los ojos y parecía contarlos, recordarlos, vigilarlos. Sentían el innegable orgullo de ser un número que finalmente integraría el 8, la tranquilidad penúltima de papá. Estaban seguros de que se alegraba por la presencia de todos y se disponía a reafirmar su autoridad, aún despidiéndose. Las salidas honrosas eran su especialidad y ellos la esperaban, claro que sí.
La ocasión podía calificarse de ténebre ( sí, se necesitaba una nueva palabra para describirla ). Era el fin, el olvido, la liberación, la regurgitación de los recuerdos, la oportunidad de desensuciar la memoria.
Crecieron con el hábito, implacablemente, impuesto de lavarse las manos. Para limpiarse primero, para librarse de los gérmenes ( ¿librarse? después aprenderían que se habían pasado la vida seleccionando a los gérmenes más fuertes ), para convertir el aseo personal en la obligación moral de cada día. Luego, el lavarse, constituyó una forma sublime de purificarse; significó acceder ,cada vez mejor , a la metamorfosis diaria, y perseguir inútilmente la albura. Todos los hijos aprendieron a conocer perfectamente sus manos antes que sus almas y a restregarse, lograr la eclosión del jabón y el manar de sus efluvios, producir la espuma, sentir que el agua se apoderaba de ellos y agradecer el milagro de lo cotidiano de separar lo artificial de lo natural y nuevamente la fusión, la confusión, como al principio de los tiempos.
Nadie se atrevió a contradecirlo y por eso cada vez resultaron los mejores cómplices para recrear la apabullante parafernalia de lavarse una y otra vez sin ninguna esperanza. Ahora podían preguntarse si lo que hicieron y lo que no hicieron estuvo bien.
Su padre sentía un especial placer al observar el espectáculo casero frecuente de sus hijos despojándose de la sordidez del mundo mediante, los que consideraba, los dos mejores aliados : el agua y el jabón.
Y ellos no recordaban en que momento empezaron a odiar los adminículos de higiene, las toallas nunca secas, el jabón reblandecido, y la sensación de estar permanentemente vigilados ante cualquier mácula que ultrajara sus manos para, a continuación, recibir la orden obsesiva de lavarse. Después se demostrarían para su mínimo equilibrio que no era necesario lavarse una y otra vez y que si las enfermedades tenían que llegar, pues llegarían.
Entre las muchas cosas que aprendieron, decidieron no involucrarse en las situaciones que demandaran decisiones difíciles ; decidieron también no adoptar responsabilidades y dejar pasar las cosas. Pero este comportamiento no fue absoluto. Eran grandes muchachos y abnegadas madres pero conservaban el estigma original, cual pecado adánico. Hasta podría decirse que eran buenos. ¿ Quién no ha tenido una marca original, casi bovina, infligida por sus padres ?
En sus trabajos y en sus casas, recordaban a su padre cuando realizaban el ritual de la purificación, y si alguna vez incubaron una actitud subversiva para contradecirlo, tuvieron que tragarse sus palabras cuando la epidemia del cólera le dió, a su padre, la razón entera y agobiante. Ese día exclamó triunfante :" Yo les dije muchas veces, lavarse es salud. Recuerden siempre lo que produce la cochinada". En adelante debieron lavarse hasta desollarse, hasta sentir la mudanza de la piel casi horaria, hasta que la epidermis fugara y sintieran un ardor especial, una nueva forma de sensualidad para relacionarse con el mundo. Por eso se decía en el barrio, en el trabajo, en las reuniones, que los Fuentes parecían siempre Nuevos. Nadie conocía la terrible verdad de repetir este ritual una y otra vez so pena de contrariar al armónico mundo de equilibrio de su casa cuyo centro de gravedad se había desplazado hacia su padre y permanecía en él.
Que interesante : Nuevos, con pocas responsabilidades, buenas personas, ilustrados e inteligentes. ¡ Qué bonita familia ¡
Se dieron cuenta que el cordón umbilical crecía inversamente proporcionalmente a la distancia que los acercaba a su padre. Y dieron con una solución : alejarse, frecuentarlo poco. Pero pronto sus parejas y sus hijos advirtieron que estaban reproduciendo maníacamente en sus hogares aquello de lo que tanto se quejaron. Recién se dieron cuenta que no podían escapar, estaban atrapados en la telaraña de la Higiene Mayor.
Recibieron de su padre, el mayor de los afectos y así lo trasmitieron a sus hijos. Fueron buenos padres. Pero invariablemente y sin darse cuenta, recordaban sus propias manos, el estigma, las veces en que se liberaron embarrándose de la podredumbre del mundo, el jugar en el fango, los carnavales. Y en el sexo la exploración cotidiana total, el sonrojo por todas las cosas que habían hecho y el remordimiento por la probable censura paterna sobre determinado acto no higiénico. Aprendieron que el fango tiene su atractivo, te ofrece una coraza para mimetizarte, te integra al grupo y precisamente a ellos les daba la razón : no enferma, no mata y no ensucia. Apenas embarra.
Y ¡Qué final ¡ ¿ Quién tenía la razón ?
Tanto haberse lavado para evitar que algo extraño ingresara a su cuerpo ( un riesgo mínimo ) para terminar compartiendo un extraño aparato de diálisis ( un riesgo muy elevado ) en el que los residuos de sangre de una y otra persona se mezclen, es decir cada vez recibir microtransfusiones de sangre.
¡ Qué irónica es la vida ¡ reflexionó una de sus hijas. Ahora para vivir, papá deberá ensuciarse internamente, una y otra vez, y no podrá lavarse. Qué increíble.
Estaban todos juntos como muy pocas veces, tal vez no volverían a reunirse y constituían esa mañana un himno familiar. Esperaban la despedida, la orden, el reproche...Eso era papá.
Y de pronto ocurrió lo poco que faltaba para que lo quisieran para siempre, la coherencia, el vivir lo que se predica, la priorización de las cosas aún en el postrer adiós. Su padre tomó aliento y pronunció, nunca más gravemente, lo que ellos hubieran querido escuchar : "No se olviden de... lavarse las manos" y expiró.
alfredo guerrón ojeda.

CUENTO CORTO: "SALUD PARA TODOS" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

Alberto recibió la llamada de su amigo Carlos y éste lo invitó a visitar por la tarde a una de sus farmacias, una más de su cadena de establecimientos comerciales dedicados a ese rubro, que poseía en Lima. Conversarían al frío de unos whiskies. Convinieron para las 3 de la tarde. Alberto apagó el televisor, se duchó y se dispuso a salir. Mariella su esposa le preguntó, a dónde vas, y él le dijo la verdad. Salió en su auto, puso un disco compacto de Joaquín Sabina, se escuchó la canción “Más de cien mentiras” y enfiló por varias calles. Lima le pareció distante y aburrida.
Por fin llegó. Se acercó a la farmacia y la vió imponente. Estaba ubicada en el distrito de San Borja, donde moraban personas de clase alta. Lo vió a Carlos y se saludaron efusivamente. Carlos estaba feliz de lo bien que le iba en los negocios y en su vida de casado. Alberto le dijo que tenía su último libro de cuentos en imprenta y que tenía fundadas esperanzas de que le iba a gustar a la gente. Lo invitó a pasar a una oficina de lunas polarizadas que ubicada discretamente en un extremo del ambiente de la farmacia, permitía dominar el escenario y controlar la marcha del negocio. Se sentaron en unas sillas cómodas muy altas frente a una mesa, muy alta también y Carlos sirvió dos whiskies para empezar y presentó unos bocaditos.
En eso Carlos le dice, Alberto, ves a ese viejito que viene hacia acá, es Don Andrés. Entonces Carlos juntó sus manos tiernamente, tratando de atrapar a Dios, y le dijo, yo le pido a Dios que Don Andrés no se muera nunca. Alberto conmovido por la extraña y piadosa confesión, aunque quedaba la duda de etiquetarla además de sarcástica, le preguntó sonriendo, porqué. Y Carlos le comentó, cholo, Don Andrés es un jubilado. Debe ganar al mes unos 900 nuevos soles de Perú (unos 300 dólares). Y lo increíble es que su día de pago, que generalmente está programado dentro de la primera quincena de cada mes, cobra y viene a mi farmacia y gasta el íntegro de su mensualidad en medicamentos para la hipertensión, para el colesterol, vitaminas y para la artrosis. Se queda sin ni un solo centavo.
Alberto, comenzó a entender, ahora sí, el sarcasmo y le dijo, cholo, pero no seas malo, acaso nunca se te ha ocurrido explicarle a Don Andrés que existen medicamentos genéricos que son de igual calidad y de mucho menor costo. Con esa información, el viejito ahorraría y le quedaría dinero para otras necesidades. Carlos le dijo, ya le he dicho hermano, pero no entiende, él dice que lo barato sale caro y que lo último que haría es desacatar una orden médica. Además que no le puedo insistir demasiado porque le puedo caer pesado y puede terminar comprando todo en la farmacia de enfrente. Alberto, le dijo, dirigiendo la mirada a lontananza y soñando ese día, cómo me gustaría tener unos 50 clientes así como Don Andrés, ya no abriría todos los días, sería un trabajo por la puras. Esperaría el día de pago de los gerontes, ese día les invitaría un almuerzo a todo dar y después que me entregaran sus sueldos, ganaría, en un solo día, 5,000 dólares. Tú sabes que mi ganancia es 30 % del total. Además, me ahorraría gastos en personal y otros rubros. ¡ Salud, mi hermano ¡
César, estaba en una zona rural, en el poblado de Cerro Blanco, situado en la carretera hacia Huaraz, una bella ciudad de la sierra norte del Perú. Estaba cumpliendo el SERUMS (el Servicio Urbano Marginal de Salud), que es una obligación para los médicos peruanos. Al graduarse los galenos están obligados a trabajar un año en zonas rurales. El villorrio no tenía calles asfaltadas y apenas tenía 6 manzanas en total, con su Plaza de Armas por supuesto. En el pueblo se había corrido la voz de que la plaza se llamaba así en honor a un hijo de Cerro Blanco, Don Francisco de Armas, quien hace muchos años, inició una travesía a lomo de bestia desde Cerro Blanco hacia Huaraz, para hacer camino al andar, a la cual llegó después de muchos días. Lo trágico es que contrajo una fiebre que después causó su muerte. Y en su homenaje le llamaron a la Plaza del pueblo con su apellido. La verdad es que esa historia nunca se comprobó ni se desmintió. Algunos jovencitos del pueblo que ya estaban estudiando secundaria se mofaban de ese relato y lo llamaban la tomadura de pelo de la historia.
César, era el médico del pueblo y no se merecía ningún respeto de los aldeanos. Él nunca se preguntó porqué, solo se acostumbró a sentir el desprecio cotidiano como una especie de saludo. Él permanecía trabajando de lunes a viernes en la aldea y los sábados iniciaba la travesía, que equivalía a una hazaña, hacia la ciudad de Paramonga para no olvidarse de la civilización. Caminaba dos kilómetros hacia las afueras del pueblo y se sentaba en un murito, a esperar impacientemente el paso de algún auto, camión o camioneta para pedir que lo saquen de ese atolladero. En una ocasión, pasó un camión que llevaba trabajadores de zafra de caña hacia la ciudad. Paró cerca de él, corrió y le pidió al conductor que lo lleve. Le dijo, amigo, soy el médico de Cerro Blanco y quisiera que me lleve, le pagaré. El chofer le dijo que no lo iba a llevar. César, pensó que era broma, y trató de aclarar la solicitud. Le dijo, disculpe, yo no deseo que me lleve en la cabina de pasajeros, que dicho sea de paso estaba vacía, aunque sea lléveme en la tolva de atrás. Y el chofer con todo el placer del mundo le dijo, no lo voy a llevar. César lo miró desconcertado, y ese día certificó el odio de los villanos hacia él o tal vez hacia todos los médicos. Lo volvió a mirar y recordó para siempre esa cara de sevicia con una extraña cicatriz en la frente que le cruzaba como un cauce y que le daba un aspecto de maldad que en ese momento lo graduaba de experto en esos menesteres.
César se lamentó de estar en esa situación. Y pensó, que huevón, yo pude haberme exceptuado de este Servicio de mierda, pero quise venir a servir a mi país y miren el trato que recibo de estos indios hijos de puta. La única esperanza era que el servicio duraba un año y ya le faltaban tres meses.
César esperó tres horas a la vera del camino y finalmente un ingeniero, muy gentilmente, lo llevó en la parte de atrás de una camioneta y tuvo la brillante oportunidad de sentir el frío (más ¿escalofriante?) de su vida provocado por la velocidad, la tolva descubierta y la ausencia de abrigo (apenas tenía puesta una chaqueta blanca de manga corta y muy delgada).
Pasaron los meses y un jueves a las 4 de la tarde, César estaba leyendo una revista en la sala de emergencias del Hospital Rural. Y agradecía la experiencia de haber realizado operaciones como la extirpación de apéndice y alguna cesárea. Con lo cual ya había salvado algunas vidas.
De pronto se escuchó que llegó una moto al pueblo y se estacionó frente al Hospital Rural. Bajó un joven y ayudó a entrar a un señor que caminaba a duras penas. El joven dejó sentado al doliente e ingresó gritando, doctor, doctor, por favor salve a mi padre, tiene un cólico que lo está matando. César le dijo al enfermero que lo traiga en silla de ruedas al paciente y lo coloque en una camilla. Luego se acercó a atenderlo, el paciente se retorcía de dolor y un rictus dominaba su cara y la deformaba. El primer diagnóstico en el que pensó fue apendicitis, que corroboró con un examen físico y con un hemograma. Se dispuso a operarlo cuando vió lo inolvidable, la cara de sevicia con una extraña cicatriz en la frente que le cruzaba como un cauce y que le daba un aspecto de maldad. Y, no pudo evitarlo, se le acercó y le dijo, amigo se acuerda de mí…haga memoria… la vera del camino…su camión…el pedido para que me lleve…y su negativa tajante…Usted tenía la sartén por el mango… El paciente empezó a sudar frío. Míreme bien, se acuerda de mí ¿o no? Usted …¿nunca se puso a pensar en la casa del jabonero?... ¿nunca se puso a pensar en que el mango de la sartén cambiaría de dueño?... ¿no reparó en las vueltas que da la vida, no? …Mírame bien indio de mierda, ahora ¡¡ Yo soy el chofer ¡¡. Yo solo necesitaba que me lleves a la ciudad y ahora tú solo necesitas que yo te salve la vida. Que increíble ¿no?... Y a todo esto …¿qué crees que debo hacer?
Muchachos, si habíamos pensado hacernos millonarios en unos 10 años, les doy un notición, seremos millonarios en apenas 2 años, como lo oyen, 2 años. El Dr. Villarreal, director de la clínica donde trabajaba Javier, apretaba frenéticamente la copa de champagne y desorbitaba los ojos para empezar a explicar a su cuerpo médico el camino corto y cómodo hacia lo más parecido a la felicidad, ser millonarios. Les dijo, muchachos, el laboratorio Tufarm nos vende la azitromicina a 10 dólares cada tableta. Y Dios nos ha puesto en el camino a un empresario farmacéutico hindú que nos ofrece la misma azitromicina a 50 centavos de dólar y me ofrece ponerle un nombre exclusivo de nuestra clínica para que no se confunda con la azitromicina que consumen los piojosos en los centros médicos del estado. Y aquí viene la idea genial que me la ha sugerido nuestro asesor financiero, la azitromicina se la venderemos a los seguros a 10 dólares cada una. Y así desfilarán los otros medicamentos, los antibióticos, los medicamentos para la presión arterial alta, para la diabetes, para el colesterol alto, para el reumatismo, para la osteoporosis. Nos llenaremos de plata.
Muchachos, ¡¡ Salud para Todos ¡¡

viernes, 16 de marzo de 2012

CANCIÓN "EL CANTANTE" POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

PARA QUE COMPRUEBEN QUE UNA CANCIÓN COMO ESTA, DE HÉCTOR LAVOE, UN ÍCONO MUSICAL  Y DE UN GÉNERO UN TANTO DIFÍCIL COMO LO ES LA SALSA, TAMBIÉN PUEDE SER INTERPRETADA POR UN AFICIONADO.


jueves, 15 de marzo de 2012

CUENTO CORTO:"RICARDO CUORE" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

Supuestamente tengo una vida regalada porque me han obligado. No necesito trabajar para procurarme el sustento. Me paso la vida caminando, observando, descansando, tomando el sol y sospecho que me miran y me han tomado en serio. He crecido amamantado por mi madre, ella me adiestró en muchas artes que nunca pude poner en práctica. Sé que mi padre fue un tipo hosco, violento y se creía el rey del mundo. El tuvo muchas hembras a su disposición, mi madre apenas fue una receptora de sus genes y de que gozó, gozó porque mi padre fue un súper macho. Y yo soy apenas el hijo de Ricardo. 
Mi padre, Ricardo, fue admirado, entre otras cosas por su tremenda fortaleza, pero de que le sirvió si nunca fue libre y ni siquiera se sintió libre alguna vez. En su descargo diremos que tuvo grandes ataduras. 
Ahora que veo el alba cada día y bostezo; pienso que esto aburrió a mi padre hasta la desesperación. El paisaje cercano presenta cambios mínimos como siempre y eso no excita a nadie. Su tragedia es que por todo ello tuvo la razón y por eso precisamente la perdió. 
Para sobrevivir mi padre debió imaginar un mundo diferente lo suficiente para que se le empezara a entreverar con la realidad; lo suficiente para que las visiones salvadoras lo obnubilen y lo obliguen a ser feliz. Pero papá no tenía alma de artista. La locura no estaba en sus planes. 
Caminar sin rumbo en un espacio cerrado es perder la ilusión a cuentagotas, es alimentar la desesperanza y aunque dicen que es bueno para el corazón, a mi padre, eso entre otras cosas, le destrozó el corazón. La comida fácil, el sueño de muchos no es ninguna ventaja cuando lo es para siempre. A papá lo derribó arteramente, le violentó su tremendo orgullo. Que fácil le resultaba comer. Y luego esperar impacientemente el paso de las horas, doblar la cerviz y esperar a que el mundo se muera una y otra vez. Mi padre se olvidó de soñar o tal vez nunca aprendió. 
Porque soñando hubiera salido de esta puta jaula aunque sea por unos instantes porque han de saber para su desilusión que los barrotes de mierda de un zoológico no bastan para detener al rey de la selva.

CUENTO CORTO:"NOS HUBIÉRAMOS CASADO TANTO" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

Mi familia y yo éramos felices. Teníamos una vida muy simple. Mi esposa se dedicaba al cuidado del hogar y mis dos hijas iban al colegio a la primaria elemental. Las veía crecer y su alegría contagiaba a todos los rincones de la casa. Mi rutina era, de mi casa al trabajo y del trabajo a mi casa. Yo siempre he sido huraño para las reuniones, me considero un gregario familiar reducido a la mínima expresión. En nuestra vida no pasaba nada extraordinario excepto que la sagrada familia se iba entronizando en nuestras cuatro paredes debido a los pocos errores que cometíamos y que nos esforzábamos por subsanar.
Me casé muy enamorado y cuando nacieron mis hijas, yo que soy un abstemio inveterado, celebré con unas peas vikingas. Ser padre era lo máximo.
Cuando mirábamos hacia atrás recordábamos solo felicidad. El presente efímero era feliz y fugaz. Y el futuro lo avizorábamos también con una pantalla virtual de felicidad. Estábamos acorralados, no teníamos escapatoria. Seríamos felices.
Cierto día, caminaba por el mercado central de Lima, al mediodía, a la hora de mi refrigerio. Y ocurrió que alguien tocó mi hombro y me dijo, hola Alberto, qué gusto de verte. Era María, una antigua amiga (en realidad era una ex­-enamorada) y me sorprendió. Hacía 15 años que no la veía y la reconocí. Había subido de peso y se mantenía bastante guapa. Hola María, también para mí, es un gusto verte. No sabía que estabas en Lima, le dije para ser cortés, pero en realidad nunca me interesó ese dato. Ella me dijo, yo si me enteré que tú vivías en Lima, que te casaste. Y que… ¿eres feliz? La pregunta me sorprendió, no tuve tiempo de inquirir porqué la pregunta y le contesté, convencido, por supuesto. María me dijo, me casé, tengo dos hijos de 7 y 9 años, y me va más o menos, dijo resignada. Yo estaba apurado, tenía que ir a hacer una gestión de mi trabajo y aceleré la despedida. María, le dije, que te vaya bien siempre. Ella se acercó, me dio un beso en la mejilla y me dijo algo ruborizada, casi como un reproche, Alberto, nos hubiéramos casado. ¿No?
Y nos separamos otra vez para nunca.
Continué viviendo mis horas felices y en la noche recordé este encuentro y pensé, nos hubiéramos casado, hubiéramos tenido dos hijos, esa otra vida juntos hubiera ocurrido.
Nuestros hijos estudian en un colegio marista, tenemos unos vecinos muy amigables y los domingos acostumbramos visitar a sus familiares, sus hermanas, o alguna prima de ella. Nuestra agenda social es bastante recargada. Hemos empezado a teñirnos el pelo porque a los años se les ha ocurrido, nunca tan inoportunamente, decolorarnos el cabello. Mi trabajo es agitado, estresante. Soy un médico anestesista y mis colegas cirujanos me confían el anochecer y el amanecer de sus pacientes. Mi esposa administra un negocio nuestro, un restaurante y nos va bien. El tiempo se pasa volando. Siempre hay personas que me comentan, doctor que increíble, ya estamos en julio ¿no? y ni nos hemos dado perfecta cuenta. Luego prosiguen con su cuenta mensual, agosto, setiembre, octubre y ya casi se acaba el año. Finalizan con su frase, este año se ha ido volando. Yo les digo, como para ironizar, sí pues el tiempo se pasa volando, el año pasado a estas alturas todavía estábamos en marzo.
Mis hijos se casaron, nos han dado 4 nietos. Me he jubilado con poco júbilo y un consultorio de experiencia con todo lo que recuerdo de la medicina son mis cuarteles de invierno. Mi esposa ha envejecido, lo guapa no se le ha ido. Un lunes he ido al barrio chino del centro de Lima y mientras compro un minpao y un vaso de chicha de maíz morado, escucho a una pareja que conversa. Están festejando, se sonríen. Escucho que se cuentan que se casaron cada uno a su manera, que son endemoniadamente felices cada uno también a su manera. Él la ha invitado a comer al lugar en donde estoy degustando comida china. Y cuando se despiden, escucho lo imposible. Recién caigo en cuenta que me estoy olvidando de olvidar. Ella le dice, casi como un reproche, Alberto, nos hubiéramos casado. ¿No?

CANCIÓN:"NO MORIRÁ JAMÁS" DE LOS ÁNGELES NEGROS CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

COMO SE DARÁN CUENTA ESTOY EN EL LÍMITE DEL TONO PORQUE SOY UN BARÍTONO BAJO, PERO HE POSTEADO ESTE TEMA COMO UN EJEMPLO MÁS DEL CURSO QUE LLEVAMOS A CABO. LA IDEA ES DEMOSTRAR QUE CUALQUIERA PODRÍA CANTAR Y HACERLO MÁS O MENOS CORRECTAMENTE.



CANCIÓN:"EL PRIVILEGIO DE AMAR" DE MIJARES CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.




lunes, 12 de marzo de 2012

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 45:"TODO SEA POR EL ROCK AND ROLL" DE EL TRI.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 44: "SE FUE" DE LAURA PAUSINI.


CANCIÓN: "ENTRA EN MI VIDA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 43: "ENTRA EN MI VIDA" DE SIN BANDERA.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 42: "ESCUCHA A TU CORAZÓN" DE LAURA PAUSINI.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 41:"COMO VIOLETAS" DE NICOLA DI BARI


CANCIÓN:"ABRAZAR LA VIDA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 40:"ABRAZAR LA VIDA" DE LUIS FONSI.


lunes, 5 de marzo de 2012

MARINERA DEL NORTE DEL PERÚ "PALMERO SUBE A LA PALMA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN

LA VERDAD, DE ESTE TEMA SOLO TENGO LA PISTA DE AUDIO PERO ES UNA MARINERA MUY BONITA Y AÚN CUANDO NO TENGA EL VIDEO KARAOKE, DESEO DEDICÁRSELA CON GRAN ESTIMACIÓN A TODOS LOS PERUANOS QUE RADICAN EN EL EXTERIOR PARA ATENUAR LA NOSTALGIA O TRANSFORMARLA TAL VEZ. SI TUVIERA EL HONOR DE QUE LA ESCUCHEN VA PARA USTEDES.

CANCIÓN "COMO UNA OLA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 31: "COMO UNA OLA" DE ROCÍO JURADO.


CANCIÓN "DEBUT Y DESPEDIDA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 30:"DEBUT Y DESPEDIDA" DE LOS ÁNGELES NEGROS"


CANCIÓN "TENGO MUCHO QUE APRENDER DE TI" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 29: "TENGO MUCHO QUE APRENDER DE TI" DE EMANUEL


domingo, 4 de marzo de 2012

CANCIÓN: "NO MORIRÁ JAMÁS" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 28: "NO MORIRÁ JAMÁS" TEMA DE LOS ÁNGELES NEGROS.


CANCIÓN: "SEÑORA LEY". CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 27: "SEÑORA LEY" DE TITO NIEVES.


CANCIÓN "TEOREMA" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 26: "TEOREMA" DE MIGUEL BOSÉ.


CANCIÓN "COMO QUISIERA DECIRTE" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

SI REPARAN LLEGO AL TONO DE LA CANCIÓN CON LAS JUSTAS PORQUE SOY UN BARÍTONO PROMEDIO. LAS CANCIONES MÁS DIFÍCILES DE CANTAR SON LAS DE CANTANTES CON ALTO REGISTRO VOCAL TIPO RICARDO MONTANER, CRISTIAN CASTRO, LUIS MIGUEL, LOS ÁNGELES NEGROS, ENTRE OTROS.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 25: "COMO QUISIERA DECIRTE. DE LOS ÁNGELES NEGROS.

SI SE DAN CUENTA EL TONO ES ALTO Y ESO QUE ESTÁ DISMINUIDO EN VARIOS SEMITONOS. ESAS SON LAS VENTAJAS DE UN VERDADERO EQUIPO KARAOKE. YO RECOMIENDO LA MARCA MIRAY. LOS HAY CON PUERTO DE SALIDA HDMI PARA CONECTAR A TELEVISORES LCD Ó LED.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 24: "NADA DE ESTO FUE UN ERROR" DE COTTY.


CANCIÓN "EL TRISTE" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 23: "EL TRISTE" TEMA DE JOSÉ JOSÉ.


CUENTO CORTO: "CON DIOS Y CON EL DIABLO". DEL BLOGGER ALFREDO.

Se despertó con sumo cuidado. Como siempre, había dormido del lado derecho de la cama (nunca del izquierdo, da mala suerte) y puso en el suelo primero el pie derecho también. (Já, pensó Rosa, yo me puedo olvidar hasta de mi nombre pero nunca de los rituales para traer la buena suerte y para alejar la mala suerte, pensó). Su mamá le había enseñado esas ceremonias aún antes de empezar a hablar por eso ella las había encarnado. Y se las había transmitido a sus hijos. Todos eran profesionales pero en los momentos de toma de decisiones, trascendentales para sus trabajos y sobretodo para sus vidas, consultaban a sus oráculos y se guiaban absolutamente por ellos. Eran creyentes de un Dios que les permitía revisar los horóscopos, visitar a los chamanes, ir a Las Huaringas, la referencia de brujería en el Perú, y hacerse baños de florecimiento cada año. 
En casa todos sabían que había un orden invisible que lo dictaba la abuela. El día en que la matriarca despertaba en silencio esperaban ansiosamente la primera frase de sus labios para poder respirar aliviados y continuar con la rutina sin sobresaltos.
Luis estaba hospedado en esa casa y sentía una presión adicional en todos los actos. Un día se ofreció a entregar unas tijeras a la señora Rosa y recibió una reprimenda con grito incluido, ¡¡ no me la entregues así ¡¡. Las tijeras se deben entregar con el mango hacia el receptor porque si se entrega por las puntas significa inexorablemente que vamos a pelear este día. Y Luis iba aprendiendo y decía mi vida transcurría sin estas angustias es decir sin adrenalina, me he perdido casi todas las emociones. Que estúpido. Otro día estaba ayudando a limpiar la mesa de comer y botó un poquito de sal, que estaba sobre el mantel, al piso para poder barrer todo. Y la señora Rosa gritó, ¡¡ No ¡¡ no me votes la sal al suelo porque si no me echas la mala suerte a mi casa.
Cada día era una nueva enseñanza. En esa casa y en el mundo había un orden impredecible pero que Luis poco a poco fue descubriendo. Y así aprendió algo utilísimo, que es de mala suerte comprar agujas después de las seis de la tarde por ejemplo.
Y la mayor lección para su vida fue que era imprescindible estar bien con Dios y con el Diablo. No tienes pierde. Ibas a las procesiones y creías fervientemente en el horóscopo, ibas a las fiestas patronales a libar licor delante de los santitos, lo cual no era pecado. Luis decía, si yo me voy a emborrachar pongo una efigie de Satanás pues y así no le falto el respeto a nadie. Pero él no entendía como se embriagaban hasta morir delante de los santitos.
Viajabas en peregrinación a la visitar la Santisisisisisíma Cruz de Motupe e ibas de rodillas por lo menos 10 cuadras hasta el camino del santuario y le pedías a la Cruz encarecidamente que te de dinero en abundancia (miles de dólares) y la cruz te lo daba. Lo máximo, la vida era así, la voz era creer en todo, si solo eres partidario de Dios no pasa nada, estás muerto.
Una vez la matriarca de la casa se despertó un domingo y vieron en su rostro un evangelio de interrogación. Se guardó un silencio expectante, reverente. Los pulsos se agitaron se temía lo peor. La matriarca caminó y antes de que le preguntaran que sucedía, pronunció unas sagradas palabras que deberían quedar grabadas en la antología de frases que cambiaron al mundo:"hoy día va a suceder algo".
Luis dijo, ¡¡ pero claro ¡¡, si últimamente no ha acontecido nada, como no se nos ocurrió. Solo la mente privilegiada de doña Elvira puede habernos prevenido de esto. Es nuestra maestra y guía.
Y en los siguientes días se cayó un avión, atentaron contra el Papa, continuó la guerra en Irán, ganó la U de Lima al Peñarol de Uruguay, vino Nicola di Bari al Perú, se estrenó La fiesta Inolvidable con Peter Sellers, seguimos en la universidad, y pasaron los días. Por supuesto los habitantes de la casa de Delfos le echaron la culpa a su vaticinio de la semidesgracia del Santo Padre y con ello la fama de pitonisa de doña Elvira se acrecentó.
Y Luis, en particular agradeció el gesto de la matriarca de habernos prevenido con sus luminosas palabras, de ese cambio trascendental que ocurrió en el mundo. No se lo contaron, él fue un testigo de excepción. Estuvimos advertidos.

CUENTO CORTO: "TAXISTA A PLAZOS". DEL BLOGGER ALFREDO.


Yo soy taxista desde hace 10 años. La empresa donde trabajaba quebró y felizmente con mi despedida me dieron una indemnización que me sirvió para comprarme un auto y trabajarlo como taxista. A los 3 años unos tipos, que no parecían malhechores, me pusieron una navaja en el cuello y me quitaron toda mi fortuna. Nunca recuperé mi herramienta para enfrentar a la vida con más ilusión. Desde entonces cada vez que puedo, consigo a alguien que me dé en alquiler un auto para trabajar diariamente.
Hoy es domingo y quiero trabajar para encontrarme a mí mismo. Ya no tengo a nadie, mis hijos han viajado al exterior y mi esposa me ha abandonado. Me han dado en alquiler un automóvil Toyota sedán (a propósito se han dado cuenta que en los suicidios, el detective siempre debe buscar el auto-móvil. Esa anécdota es buena, se me ocurrió sólo porque soy taxista) y salí a recorrer la ciudad de Lima para conseguir algunos clientes. Les diré que las Plazas, más que las calles, siempre me han fascinado, por su belleza, por su forma, por su obligación de aduana del tráfico. Pasé por la Plaza del distrito de San Luis, que une a las avenidas Aviación, Arriola y San Juan. Esta es una Plaza ovoide, bastante descuidada y con unos monumentos poco famosos. Circundé la plaza y fui a llenar el tanque de gasolina de mi carro en un grifo del contorno. Mientras llenaba el tanque, pensaba en cómo se puede conocer una Plaza bastante bien. Y me respondía, poniendo tu humanidad en ella, llorando en la plaza algún amor extraviado, descansando en un día de sol, leyendo el periódico una mañana de domingo, quedarse en la Plaza viendo pasar a los autos, y sobre todo, certificando que el mundo da muchas vueltas. Pagué por el combustible y salí en primera, avancé una cuadra y volteé en U para regresar a la Plaza. Por alguna razón imánica ingresé a la Plaza e inicié un recorrido que transformaría mi manera de ver al mundo. Me coloqué muy cerca al borde de la acera de la Plaza y empecé a dar vueltas. Estaba concentrado en el trayecto y de vez en cuando veía a los conductores que pasaban cerca a mí. Seguí con la segunda, tercera y cuarta vueltas. Nadie se dio cuenta de lo raro de mi camino. Ví las bancas en varios ángulos, a una pareja besándose en todos los perfiles, al monumento que me miraba fijamente, luego con el rabillo de sus ojos y finalmente el monumento me perdía al darle la espalda para a continuación volver a verme. Los edificios de los contornos tenían otros detalles que no había observado en las primeras vueltas, era increíble, parecía que los dueños se apresuraban en cambiarlos en cada redondel que dibujaba. Yo seguía dando vueltas y aparecían nuevos personajes, un heladero que se estacionaba, que vendía su algidez y que luego iniciaba el éxodo para una vida mejor. Unos jóvenes esperaban un ómnibus de servicio público para que los llevara a una reunión agradable que se adivinaba en la expectativa de sus ojos. Yo los veía que se acercaban y luego se alejaban y al volver a verlos estaban en diferentes órdenes y me preguntaba si eran los mismos o no. Es que el orden importa, yo tenía un orden tenía un recorrido fijo, yo sabía cómo empecé este negocio pero no sabía cómo iba a terminarlo, en todo caso no lo premedité, que conste. Yo seguía dando vueltas y poco a poco me convencía que eso era lo que quería y nadie tenía que criticarme por ello. Cuando pasaba por el mismo lugar se me ocurría que no había pasado el tiempo y que no había envejecido. Y eso me seducía tremendamente. Continué mi recorrido y recordé las tantas veces que cumplí ciclos en mi vida, me divorcié dos veces, perdí mi trabajo en tres oportunidades, los ciclos de todos los días que viví, las veces que me perdonaron antes de volver a agredir a mis seres mal queridos, los libros que leí en repetidas oportunidades. Seguí dando vueltas y sonreí. Me pregunté, porque no me voy, porque no salgo del ruedo. Ya no podía irme, esa era la pesadilla (¿o la felicidad?) que tantas veces me acosó hasta acorralarme y que hoy tenía la brillante oportunidad de cumplirse. Hay destinos que son circulares y más exactamente, ovoides. Seguí dando vueltas y algunas personas se dieron cuenta de ese proceder que les resultaba absurdo, les resultaba incómodo, les recordaba cuán cuerdos eran y eso es subversivo. Empezaron a avisar a otras personas que había un auto con un camino raro con un chofer inescrutable, pero que lo más probable es que estuviera loco. Algunos aplaudían cada vuelta que terminaba o que empezaba. Empezaron a aglomerarse, de pronto fui famoso, me había convertido en un reality. Pero ellos se desilusionaban, cuando se percataban que lo mío, iba en serio. Y cambiaron el tono de la alarma, cuando lanzaron el alerta de peligro y avisaron a la policía. Saben, yo no le estaba haciendo daño a nadie, yo me cuidaba de no estorbar al tráfico. Por último, no está prohibido dar vueltas a una Plaza. Pero me quisieron detener. Entonces ví a un camión que ingresaba a la Plaza, aceleré lo más que pude en la primera vuelta, me había transformado en la imaginación de esos trasnochados denunciantes, frenaba en las curvas, mientras no perdía de vista al camión, e inicié la última acelerada para impactarlo justo en la curva. Me enclavé debajo de su chasis, pero el golpe me despistó y con mi auto dí varias vueltas de campana. Vueltas, vueltas y más vueltas.

CUENTO CORTO: "ESTOY MUERTO". DEL BLOGGER ALFREDO.


Alberto había perdido la ilusión de seguir, el sabor por las cosas simples y sintió, en lo más profundo de su ser, que ese día debía tomar una decisión. Analizó su decisión y convino en que era muy lógica y pensó, ya no voy a comer. Ya no necesito energía, ya no voy a trabajar, voy a quedarme quieto, completamente inmóvil. Si no me muevo no será necesario que ingiera alimentos. Voy a tratar de no pensar e incluso me voy a deshacer de mis sentimientos, de mis recuerdos. Ya había estado practicando ejercicios de inmovilidad y había sido traicionado por sus párpados y por su tórax. Sus párpados invariablemente batían, cual persianas, la ventana de sus ojos. Y no podía evitarlo, así que, como una solución brillante aunque totalmente oscura decidió cerrar los ojos. Y al tórax, pensó, ¿ cómo detenerlo ?, podía hacerlo por algunos minutos. Aguantaba la respiración y conseguía un estado de hibernación que deseaba que fuera para siempre y que invariablemente terminara con él en pocos días. Pero el tórax, terco, después de una licencia de algunos minutos siempre crecía, como el fuelle que es, y volvía al punto de inicio una y otra vez. 
Alberto se preguntó, para que voy a comer si yo sé que no tengo vísceras, no tengo tripas, no poseo intestinos a los que les sirva el alimento diario que me pueda conseguir. Además que cada vez se ha puesto más difícil conseguir alimento. Definitivamente ya no necesito comer y además quiero protestar contra el mundo. Así que ya no voy a comer.
Alberto se hizo la última pregunta, yo estoy vivo o estoy muerto. Se desabotonó la camisa y puso delicadamente la palma de su mano derecha sobre su pecho para detectar aunque sea un mínimo latido. No sintió la más mínima vibración, se dio cuenta que estaba descorazonado. Era la prueba que le faltaba. Sacó la mano, cerró su camisa y dijo, estoy muerto.

CUENTO CORTO: RICARDO CUORE. DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN..


Supuestamente tengo una vida regalada porque me han obligado. No necesito trabajar para procurarme el sustento. Me paso la vida caminando, observando, descansando, tomando el sol y sospecho que me miran y me han tomado en serio. He crecido amamantado por mi madre, ella me adiestró en muchas artes que nunca pude poner en práctica. Sé que mi padre fue un tipo hosco, violento y se creía el rey del mundo. El tuvo muchas hembras a su disposición, mi madre apenas fue una receptora de sus genes y de que gozó, gozó porque mi padre fue un súper macho. Y yo soy apenas el hijo de Ricardo.
Mi padre, Ricardo, fue admirado, entre otras cosas por su tremenda fortaleza, pero de que le sirvió si nunca fue libre y ni siquiera se sintió libre alguna vez. En su descargo diremos que tuvo grandes ataduras.
Ahora que veo el alba cada día y bostezo; pienso que esto aburrió a mi padre hasta la desesperación. El paisaje cercano presenta cambios mínimos como siempre y eso no excita a nadie. Su tragedia es que por todo ello tuvo la razón y por eso precisamente la perdió.
Para sobrevivir mi padre debió imaginar un mundo diferente lo suficiente para que se le empezara a entreverar con la realidad; lo suficiente para que las visiones salvadoras lo obnubilen y lo obliguen a ser feliz. Pero papá no tenía alma de artista. La locura no estaba en sus planes.
Caminar sin rumbo en un espacio cerrado es perder la ilusión a cuentagotas, es alimentar la desesperanza y aunque dicen que es bueno para el corazón, a mi padre, eso entre otras cosas, le destrozó el corazón. La comida fácil, el sueño de muchos no es ninguna ventaja cuando lo es para siempre. A papá lo derribó arteramente, le violentó su tremendo orgullo. Que fácil le resultaba comer. Y luego esperar impacientemente el paso de las horas, doblar la cerviz y esperar a que el mundo se muera una y otra vez. Mi padre se olvidó de soñar o tal vez nunca aprendió.
Porque soñando hubiera salido de esta puta jaula aunque sea por unos instantes porque han de saber para su desilusión que los barrotes de mierda de un zoológico no bastan para detener al rey de la selva.

"SI LAS FLORES PUDIERAN HABLAR" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO.

HUBO UN LAPSUS PAJAREATUS. DISCULPEN HABÍA POSTEADO OTRO TEMA.

CURSO DE KARAOKE- PRÁCTICA N° 22 "SI LAS FLORES PUDIERAN HABLAR" DE NELSON NED.


CANCIÓN"PARA SIEMPRE" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO.


CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 21: "PARA SIEMPRE" DE MAGNETO.


"CUANDO ACABA EL PLACER" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO.


viernes, 2 de marzo de 2012

CUENTO CORTO:"EL BUEN LADRÓN" DEL BLOGGER ALFREDO.

Yo soy un ladrón y para mí a mucha honra (deshonra dice la gente). Ser ladrón no es fácil. La gente critica basada en juicios de valor que en estos tiempos de globalización no tienen sentido. Todos robamos, unos más que otros. Los obreros, los gerentes, los profesionales, los políticos, los banqueros, los padres, los hijos, los religiosos, los países. Estamos en la cultura del robo.
Los obreros no trabajan lo que debieran amparados en bajos salarios que a su vez, son el robo de los gerentes y de los dueños de las empresas. Los banqueros ni que decir, pueden robar a su regalado gusto y si se les descubre resulta de necesidad nacional rescatarlos y es deber patriótico no juzgarlos a causa de un interés supremo, mantener la indemnidad del sistema financiero. El robo perfecto. Bien lo decía Brecht.
Los padres roban el tiempo que les corresponde a los hijos y se justifican diciendo que los tiempos están difíciles y que es menester trabajar cada vez más. Las empresas roban el tiempo familiar, han invadido con los celulares, la internet ese espacio vital en que la familia se desarrollaba y que proveía de un mínimo equilibrio para la personalidad de sus integrantes. Las empresas justifican su robo diciendo que la competencia es salvaje y que los trabajadores deben estar plenamente identificados y dispuestos las 24 horas para colaborar. Los horarios resulta que ahora son defectos arcaicos que deben superarse en la hora actual para acceder al desarrollo que es otro robo. Los países se desarrollan cuando uno le roba al otro. Así que debemos prepararnos para robar.
También los padres se justifican diciendo que no interesa la cantidad de tiempo que les entregan a sus hijos, y dicen que lo que interesa es la calidad del tiempo que dan a su prole. En esa lógica, que es un robo descarado, se va a llegar al minuto semanal ofrendado de los padres para sus hijos pero un minuto completamente denso, completo, cabal, entero, casi con el peso gravitatorio de un agujero negro.
Y los religiosos roban nuestra libertad de creer en lo que deseamos libremente o no creer en nada que ya es creer. Nos infunden miedo, ergo nos roban la valentía.
Así que no se extrañen que yo tenga el orgullo de ser ladrón, pero no un simple ladrón, soy un predador y me considero un artista en este quehacer. Me despierto a las seis de la mañana desayuno algo frugal y luego busco a mis amigos con los que trabajo en equipo. Nos estacionamos en una esquina. Esperamos pacientemente. Soportamos las miradas de los que nos reconocen, nos da algo de vergüenza pero que le vamos a hacer, ese es nuestro trabajo. Ser ladrón no es fácil, la gente habla estupideces. Haber, quiero verlos que vengan a ganarse la vida robando a nuestro estilo y les aseguro que no sacarán ni para un pan. En cambio ellos roban más sutilmente en todos los demás ámbitos que les he mencionado. Nosotros debemos soportar el frío, el chantaje de los serenos, de la policía. A veces otros grupos ( ¿ puedo llamarlos colegas sin que se rían ? Se dan cuenta ni siquiera nos toman en serio) invaden nuestro territorio y es necesario aclarar muy virilmente con ellos los límites porque si no perdemos nuestro posicionamiento en este mercado, que varios años de esfuerzo nos ha costado.
Recuérdenlo ser ladrón no es fácil. Nosotros tratamos de no hacer daño, abordamos personas descuidadas, arrebatamos teléfonos celulares previa constatación de su valor para que sea rentable, monederos, carteras, bolsas de compras, aretes de oro. Muchas veces nos estafan, podría decirse, brilla como oro, se ve como oro, se luce como oro, la hace bonita a la chica, como el oro y cuando nuestro amigo reducidor le vierte el ácido para comprobar su nobleza resulta que no es oro. Trabajo por las puras. ¿Quién ha robado a quién?
Toda la mañana estamos analizando movimientos y tomando decisiones, manejamos un lenguaje no verbal casi perfecto, ademanes, silbidos. Y también nos desplazamos cuando se aparecen los policías y los serenos. Felizmente sabemos sus horarios de relevo y aprovechamos al máximo esas horas para trabajar libremente. A mediodía hacemos un alto para almorzar. Yo rezo antes de tomar mis alimentos y le agradezco a Dios porque provee para mis necesidades y las de mi familia. Yo soy responsable. El dinero que obtengo lo llevo para mis criaturas y a veces disfruto con algunas chicas un momento de relax sobretodo los sábados por la tarde. Nosotros los ladrones no tenemos seguro social, ni jubilación, ni vacaciones y así dicen que ¿es fácil ser ladrón? Un poco más de respeto. Creo que tengo la suficiente autoridad moral para reclamar un trato diferente.
Muchos de mis trabajos ocurren sin que la persona se dé cuenta, pero eso es arte y el arte no se aprende de la noche a la mañana. Es un acúmulo de experiencias, incorporación a tu personalidad de los consejos de tus padres, de tus profesores, en el sentido de que lo que hagas en tu vida házlo bien. Muchas veces he pensado que en varios de mis trabajos me han debido aplaudir y la gente ha maldecido. Es increíble. Yo soy un ladrón y reclamo consideración porque somos colegas todos, unos más que otros.
Después de almorzar un menú barato, salimos a trabajar nuevamente. Subimos a los medios de transporte masivo, analizamos las posibilidades de éxito. A veces me distrae algún culo formidable. Esa es otra de mis habilidades artísticas, una especie de radar localizador de culos, pero ¡ Qué culos ¡. Lamentablemente esta habilidad se convierte en defecto porque muchas colisiona con la concentración que exige mi serio trabajo de robar y muchas veces me ha hecho perder plata por quedarme embelesado con un trasero de orgía.
Alguna vez, cuando me ha ido mal o regular, le he pedido a Dios que me envíe un regalo y casi al final del día se ha aparecido un señor con una apariencia de jubilado saliendo del banco y con el bolsillo hinchado. Junto mis manos, cierro mis ojos, elevo mi rostro y le agradezco a mi Dios Todopoderoso. Lo seguimos a nuestro elegido y en el momento preciso lo abordamos y lo bolsiqueamos. Nos salva el día, lo cual agradezco muy sinceramente a nuestro Creador. Al fin Dios es un padre y los buenos padres como él perdonan y aún más, proveen.
Mi máximo héroe es Dimas, el buen ladrón, pero la verdad no quiero morirme tan rápido y menos crucificado. Dimas llevó a nuestra profesión a los niveles más inimaginables y eso se venera. ¿Qué si quiero que mis hijos sean ladrones como yo actúo o ladrones de otro tipo ? No lo sé. En todo caso los voy a apoyar para que sean los ladrones del tipo que deseen.
Yo les dije soy un ladrón y no me avergüenzo, y sobretodo soy un artista, actúo sin que nadie se dé cuenta. Incluso pude arrebatarles en este mensaje algunos minutos de su tiempo y recién lo notaron. Por eso digo que ser ladrón es mi vocación.

CUENTO CORTO: "TURBÁNDOME MÁS" DEL BLOGGER ALFREDO.

Porque a mi mujer la habrán criado tan puta. ¿Las putas nacen o se hacen? ¿Las mujeres son putas o se hacen?
Mi esposa es una mujer guapa con un rostro atractivo y unas carnes imanes de lujuria. Ella aparenta no darse cuenta de la saliva de los lobos que derraman como una pleitesía a su estela estrogénica.
Desde que me enamoré empezó mi calvario. Ella lleva la coquetería a la expresión más excitante, a la mínima expresión. Se hace la que con ella no es. Yo he sobrellevado estos años con estoicismo, algunas veces le he reclamado pero ella sale indemne con sus llantos y con su invitación a que vayamos al sicólogo. ¿Que le voy a explicar al profesional, que a mi mujer no puedo controlarla y que si le pongo un guardián las 24 horas del día terminará acostándose con su cancerbero?
Mi mujer se hace la cojuda, siempre tiene pretextos. Rápidamente hace migas con cualquiera, con el vigilante que nos cuida la cuadra donde vivimos, con el vendedor del mercado, con el taxista. Se consigue sus números de teléfonos celulares y los trata con una familiaridad cínica. Cuando yo la acompaño está nerviosa porque repentinamente cualquiera la llama Cecy. Ni siquiera les ha enseñado a que la respeten, claro, ese es su juego, una invitación a la irreverencia. Y que casualidad, todos los que están familiarizados con ella son hombres. Casi no trata con mujeres. Pero ya está pasando los límites de la ribera opuesta del Rubicón.
Hace poco vino un amigo mío de la infancia al que no veía hace más de 10 años. Y yo ví que se cruzaban miradas cómplices entre los dos. Así que me tracé un plan, lo invité a mi amigo un sábado y justo antes de que llegara me hice el que salía a comprar pan. Me puse en un parque que colinda con mi casa a observar. Llegó mi amigo, tocó el timbre y salió mi esposa y ví que se portó inusualmente cortés lo saludó con un beso en la mejilla y lo hizo pasar. Cerraron la puerta. La ventana de mi sala es amplia y estaba abierta por el calor del estío. Yo me puse en la glorieta del parque a observar con mis catalejos a las aves que pululan por allí y discretamente con los prismáticos vigilaba la sala de mi casa. Ellos charlaban animadamente. ¿Qué charlaban? Nada bueno. Conociendo a mi esposa seguro que ella ya le había dado riendas para tratar temas íntimos, personales. Porque se reían, como que se burlaban de alguien. Le estaba contando acaso que yo ronco y que no la dejo dormir. Él le estaba diciendo entonces que duerma en otra parte, que de vez en cuando se escape a un hotel. Que él conocía un hotel bastante bueno y módico en costos. Es decir tempranito nomás, llegaban al tema de la alcahuetería y el puterío.
Regresé de comprar y lo saludé a mi amigo. Después mi esposa nos sirvió una bebida y unos emparedados. Y me dí cuenta que se había cambiado de ropa, se había puesto una blusa recontra escotada, como dicen una invitación al sufragio japonés (a la erección) y un pantalón blanco apretadísimo y que le traslucía su ropa interior. Una descarada. Cuando nos servía la bebida y se agachaba los senos se le salían del brassiere y los ojos de mi amigo se desorbitaban.  Apenas se fue mi amigo, la increpé que como era posible que sea tan prostituta de vestirse así sólo para que se la quieran montar. Ella me gritó defendiendo lo indefendible. Me dijo que basta, que hasta cuando yo le iba a crear estas escenas, que nuestros hijos ya estaban grandes y que ella nunca me había faltado el respeto. Y finalmente, el viejo truco, lloró. Con eso, otra vez, quedé como el malo de la película.
Me dije, a estos pendejos me los descubro in fraganti, y para ello ideé un plan. Yo tengo un reproductor de video MP4 de muy poco grosor, que además es grabador de voz, puede grabar todo lo que le permite la batería en 2 horas, es pequeño y no hace ruido. Invitaría a mi amigo a cenar y los dejaría solos un buen rato pero previamente dejaría debajo del sofá el reproductor de MP4 que sería el encargado de grabar todas sus alcahueterías.
Pasaron los días y lo invité nuevamente a mi amigo y le dije que se viniera con su enamorada para el sábado para almorzar. Para suerte mía, mis hijos se habían ido a un retiro religioso fuera de la ciudad. Entonces íbamos a estar solos los cuatro. Pero si Roberto no traía a su enamorada ya estaba “medio pecho comido” solo faltaba ampayarlos. Y ¿que creen? Mi amigo se apareció solo en mi casa y nos comentó que nos agradecía pero que su enamorada estaba indispuesta y que no iba a acudir a esta invitación. Yo serví pisco para que hierva la sangre y les dije voy a comprar unos tamalitos verdes para acompañar el almuerzo. Ya regreso. Y me fui. Seguro que apenas me había retirado, él la comenzó a desvestir con la mirada y ella lo hizo con sus manos y luego se entregaron al único freno que pone fin al pecado, el desenfreno. Harían el amor en el sofá, él le taparía la boca para evitar el escándalo y luego se calmarían. Retomarían la cordura totalmente arrepentidos de haberla retomado. Se acomodarían y me esperarían con un hálito judásico.
Demoré unos 30 minutos, lo suficiente para que el temor de verse descubiertos eleve al máximo la lujuria. Al regresar los ví tranquilos e investigué algún lenguaje de señas entre ellos y no lo descubrí. Almorzamos, conversamos de antaño, nos reímos. Después Roberto gentilmente se despidió. Cecy me dijo, cholo, voy a descansar, por favor me lavas los platos. Y se fue a dormir.
Qué descarada, aunque sea hubiera fingido que estaba entera para despistarme. Cuando estuve seguro que ella no regresaría moví el sofá, y saqué el MP4. Me lo llevé al baño, le puse los audífonos, busqué el archivo de audio y le dí el play del deshonor. Lo escuché y extrañamente no hubo ninguna conversación alusiva a pareja ni jadeos ni susurros. ¡¡Qué vivos¡¡ Se habían dado cuenta de que estaban siendo grabados y habían dejado el sexo para otra ocasión. En un momento se escuchó en la grabación un silencio de 3 minutos. Seguro que en ese momento por señas habían acordado verse en otro lugar.
Y antes de que planeara esta nueva tarea pendiente, me dí tiempo para disfrutar con mis propias manos, turbándome más y viceversa.

CUENTO CORTO:"SIN UN ADIOS" DEL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

Abuelita, ayer fui a tu casa a saludarte. Me recibiste como solo tú sabes hacerlo. Siempre me has dicho que soy la reina y ya estoy convencida. Me permitiste desordenar todas tus cosas, tus tejidos, tus manteles pintados, tus álbumes de fotos, los recuerdos de tus hijas. Luego me preparaste el jugo de ciruela que tanto me gusta y me llamaste al sillón de la sala para sentarnos a conversar.
Me dejaste que me acueste en tu regazo y acariciaste mi cabeza con tus manos que resbalaban sobre mis cabellos. Y yo fui muy feliz.
Conversamos de muchas cosas, me contaste de un pretendiente que tuviste, del colegio donde estudiaste y del cariño que se tienen entre varias amigas de tu promoción. Yo te conté de mis estudios, de mis amigos y de mis clases de marinera, y me pediste que bailara para ti. Por supuesto que lo hice y cuando me veías yo pensaba que esa era la taquilla que quería para mi espectáculo, ni más ni menos. Acabé de bailar y después acabó la música. Yo te expliqué que eso no debía suceder y que era porque todavía soy aprendiz. Tú me dijiste, mi reina, no te preocupes, todos somos aficionados, la vida no da para más. Eso lo dijo Charles Chaplin. Cuando acabé mis evoluciones, tú me aplaudiste con sonoridad, con entusiasmo, con mucha alegría y me hiciste sentir como una gran bailarina.
A las 9 de la noche, mamá pasó a recogerme. Me diste un beso y un abrazo muy largo ¿no querías que me vaya?
En los días siguientes, cuando pregunté por ti, mamá me dijo que esa misma noche, la joven que vive contigo contó que te llevaste las manos a la cabeza, gritaste (de dolor ¿no mamita?) y luego te llevaron al hospital.
Abuelita ahora que han pasado varios meses, yo pienso que decidiste el camino más triste para despedirte. Te fuiste sin más.
Han pasado varios días y no he sabido mucho de ti. Te extraño mucho. Me están llevando a una sicóloga que me dice que las personas que queremos pueden enfermarse incluso muy gravemente y morir, pero que debemos aceptar las cosas porque la vida es así. Y entre tanto tú no vienes, abuelita.
Yo le pregunto a mamá que porque no regresas a casa. La veo llorando y me dice que estás enfermita y que ya vas a venir. Yo le insisto que cuándo será, que día. Y mamá se molesta y me cambia de tema. Abuelita mañana voy a cumplir 11 años y no estás.
Abuelita me han dicho que ya estás en casa y ése es el mejor regalo que Dios me tenía reservado. Pues, me he puesto bonita con un vestido que me regalaste, he cortado unas flores del jazmín de mi casa y las he sembrado en mis sienes; todo para celebrar que puedo verte otra vez.
Abuelita, por eso te digo que elegiste el camino más cruel para irte. Allí estás en tu silla de ruedas, me ves, sonríes, te has olvidado de hablar y también te has olvidado de nosotros. No reconoces a nadie. Sonríes sin motivo.
Sí abuelita, ya te fuiste para siempre y ni siquiera te despediste de mí.
Pero tu presencia que ya no es, es nuestro único consuelo. Solamente que nosotros podemos quererte, y tú no. Solamente que nosotros nos alegramos de tenerte y tú no. Solo que a nosotros nomás nos duele tu partida y a ti no. 

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 19: "VÍVEME" DE LAURA PAUSINI.

POSTEO ESTE GRAN TEMA DE LA CANTANTE ITALIANA EN TONO PARA VARÓN.

"QUE GANAS" CANTADA POR EL BLOGGER ALFREDO GUERRÓN.

TEMA MUY DIFÍCIL, HE TENIDO QUE BAJARLE VARIOS SEMITONOS PARA PODER INTERPRETARLO. ES QUE MONTANER ES UN FUERA DE SERIE Y  NOSOTROS UNOS SIMPLES MORTALES.

CURSO DE KARAOKE - PRÁCTICA N° 18: "QUE GANAS" DE RICARDO MONTANER.